1535 Carabela Santiaguillo

Réplica de la carabela Santiaguillo

 Astillero: Iztapa (Guatemala)

Tipo: Carabela

Autorizado: Monarquía Hispánica

Botado: 1532

Tripulación: 40

 La nave fue construida en los astilleros Iztapa (Guatemala) en 1532, siendo su armador Pedro de Alvarado. Fue adquirida por Francisco  Pizarro y Almagro, quienes habían organizado una expedición a Chile.

 La carabela de dos palos aparejado con vela latina, y con una tripulación de 40 hombres, se cargó con fierro, armas, vestimentas de soldados, herraduras, vino, y otras provisiones, zarpó del Callao (Perú), al mando del piloto Alonso de Quintero, en 1536, con el objeto de alcanzar las tropas de la expedición terrestre de Almagro.

 Tras una ardua navegación de cuatro meses, en septiembre de ese año arriba a las costas de una gran herradura, donde descansan. Allí se abastecieron de víveres y agua mientras esperaban las tropas de Almagro, solo acompañados por tribus de indígenas changos que habitaban la zona.

 Alonso de Quintero revisa las cartas de navegación, y al no haber registro de esta protegida bahía, la consigna para la armada española bautizándola como bahía de Quintero. También es el descubridor de Valparaíso. Al pasar las semanas y no tener indicios de la expedición de Almagro, nuevamente emprende viaje al sur y arriba a la bahía de Quintil, donde se produce el encuentro con la avanzada de Almagro, al mando de Juan de Saavedra, logrando así abastecer la hueste conquistadora.

En 1544 Pedro de Valdivia le ordenó la exploración hacia el sur, cometido en el cual la pequeña carabela no tuvo éxito habida cuenta del pésimo estado en que se encontraba después de cuatro meses de navegación desde el Callao. Se desconoce el destino final de la Santiaguillo.


Bandera de la casa de Austria

 En 1986, se construyó en los astilleros Adolfo Muñoz Díaz de Constitución (Chile), con madera de los bosques de roble, una réplica a escala real del buque, basada en los estudios del modelista Sergio Leni y el diseñador naval Juan Ciorba Vinz.

 La embarcación fue botada y navegó hasta Valparaíso, donde fue recibida por la ciudad engalanada para la celebración de sus 450 años, el 12 de octubre. El barco se transformó en un símbolo de Valparaíso y permaneció anclado en el puerto donde recibió visitas de turistas y estudiantes.

 En representación de Chile fue presentado en la Expo-Génova 1992. Posteriormente se instaló en tierra en la explanada de las lanchas turísticas del Muelle Prat, donde el paso de los años y la falta de mantención adecuadas obligan a desguazarlo en 2012.

1526 Las aventuras de Pedro Serrano

 Fecha de partida: 1526

Barco: Patache

Es un tipo de embarcación de vela con dos palos, muy ligera y de poco calado, que en sus inicios fue un barco de guerra, estando destinado a la vigilancia e inspección de las costas y puertos, y que solía ser de unas 30 toneladas.

Patache


Capitán: Pedro Serrano


Bandera de la Casa de Austria

Expedición:

En 1526, un fuerte temporal sorprendió a un patache español que navegaba de La Habana (Cuba) a Cartagena de Indias (Colombia), pereciendo en el hundimiento toda la tripulación, con la excepción del capitán del barco, Pedro Serrano, que logró llegar a un inhóspito banco de arena sin apenas vegetación y sin fuentes de agua dulce.

Banco Serrana

Lo que siguió al naufragio fue una auténtica odisea, ya que su alimentación era fundamentalmente de pájaros y peces, y bebiendo muy a menudo sangre de tortugas marinas como suplemento al agua de lluvia que de vez en cuando podía recoger. Fue fundamental la idea de utilizar caparazones de moluscos, tortugas y un pequeño depósito, que pudo construir con los restos del naufragio, para almacenar el agua.

Cuando ya llevaba tres años viviendo en el banco de arena, recibió la visita de otro sobreviviente de otro naufragio, que había llegado hasta la orilla en un pequeño bote. Pedro Serrano y su nuevo acompañante quedaron totalmente aislados, en la más profunda soledad durante los ocho años siguientes. Como el banco estaba desprovisto de cualquier refugio, los dos náufragos construyeron durante su larga odisea una pequeña torre a base de rocas y corales, que además de refugio contra los vientos reinantes les sirvió para efectuar señales de humo a partir del fuego que encendían de vez en cuando con los restos de naufragios que iban llegando a la playa.


Finalmente, en 1534, la tripulación de un galeón
 que iba a La Habana desde Cartagena de Indias divisó las señales de humo que los náufragos hacían desde su banco de arena. Enviaron un bote para socorrerles y los llevaron al galeón. Tristemente, el compañero de Serrano durante ocho años falleció al poco tiempo de haber embarcado en el galeón. Ni siquiera llegó a divisar tierra firme después de ser rescatado.

Banco Serrana, en la actualidad

La suerte fue muy distinta para Pedro Serrano, quien consiguió regresar a España para comenzar una nueva vida que le dio fama y dinero y le convirtió en un personaje famoso no solo en la Corte Española, sino también en el resto de Europa, debido a los muchos viajes que hizo para narrar su aventura en las reuniones de la alta sociedad. Su relato se encuentra hoy día en el Archivo General de Indias, en Sevilla.

Daniel Defoe, escritor inglés nacido en 1661 y autor de Las Aventuras de Robinson Crusoe, tuvo durante su vida una época en la que se dedicó a negocios que le llevaron a España, lo que le dio la oportunidad de conocer con detalle la historia de Pedro Serrano, que todavía casi dos siglos después seguía siendo recordada. Los últimos estudios sobre Las Aventuras de Robinson Crusoe y su autor señalan que la obra que Daniel Defoe terminó de escribir en 1719, se basaba fundamentalmente en la historia real de Serrano.

1526 Expedición de Caboto

Fecha de partida: 5 de abril de 1526

Lugar de partida: Sanlúcar de Barrameda (Cádiz)

Barcos

Tres naos y una carabela, con 210 hombres.

Comandante: Sebastián Caboto


Explorador y cartógrafo nacido en Venecia en 1484. Siendo niño, en 1497, viajó a Terranova (norteamérica) junto a su padre Juan Caboto, bajo bandera inglesa. En 1515 es nombrado capitán por Fernando el Católico.

Bandera de la casa de Austria

Expedición

Expedición en busca de un paso hacia las Molucas. Llegaron hasta Brasil, a la factoría de Pernambuco, donde los portugueses, y luego los náufragos de la expedición de Solís, le informan que recorriendo el Río de la Plata había grandes cantidades de oro y plata, en la que llamaban "sierra de la plata". Entonces decide anular la expedición a las islas Molucas y dirigirse en busca de riquezas. El lugarteniente Martín Méndez, el capitán Francisco de Rojas y el piloto de la nave capitana Miguel de Rodas, se opusieron a los cambios de planes, por lo que Sebastián Caboto los abandonó en una isla.

La expedición ancló en el cabo de Santa María (Punta del Este), donde construyeron una embarcación para navegar por el Mal Dulce (Río de la Plata). En 1527 Caboto fundó el puerto de San Lázaro, primer asentamiento español en Uruguay. En mayo de 1527 anclaron sus mayores naves en un fondeadero en el río San Salvador, donde construyeron un asentamiento.


El 9 de junio de 1527 construyó el fuerte Sancti Spiritu en el río Paraná, siendo el primer establecimiento español construido en Argentina. El capitán Gregorio Caro quedó al mando del fuerte, a donde llegó la expedición de Diego García de Moguer con tres buques. Caro le pidió que auxiliara a Caboto, por lo que las dos expediciones se unieron y exploraron el río Pilcomayo. En 1528 viajó por el río Paraguay. En 1529 el fuerte Sancti Spiritu fue asaltado y destruido por los indígenas, destruyendo las embarcaciones que se encontraban en el lugar. Gregorio Caro y los supervivientes se reunieron con Caboto y Moguer en el fuerte San Salvador. Caboto regresa en agosto de 1530 a España, donde se le juzga por abandonar la expedición a la especiería. Fue declarado culpable y deportado a Orán  el 1 de febrero de 1532.

Miembros destacados

Martín Méndez, teniente general
Miguel de Rodas, piloto de la nave capitana
Francisco de Rojas, capitán de buque

Exploraciones al Río de la Plata